Si algo hemos aprendido durante la pandemia de COVID19 es la importancia de que nos sintamos lo más a gusto posible en nuestra casa.
Si algo hemos aprendido durante la pandemia de COVID19 es la importancia que tiene nuestro hogar, ya que los repetidos confinamientos y restricciones nos han hecho pasar más tiempo que nunca en casa.
Seguro que en este tiempo has sentido la necesidad de ir mejorando cosas en tu vivienda para estar más a gusto. Ahí es donde la domótica puede convertirse en tu gran aliada, permitiéndote automatizar esas tareas que haces cada día y que no te aportan nada, para que puedas dedicar tu tiempo a lo que realmente importa.
Vamos a ver algunos ejemplos:
Aumentar el confort
Subir y bajar las persianas
Es una de esas tareas que hacemos todos los días al levantarnos y cuando oscurece o nos vamos a dormir. Si dispones de persianas motorizadas, puedes domotizarlas y programar su apertura y cierre en un horario determinado.
Por otro lado, puedes programarlas en base a otro tipo de eventos, por ejemplos, la puesta de sol. De esta forma, no tendrás que preocuparte de ir cambiando la hora de cierre a medida que va anocheciendo más tarde en primavera, por ejemplo.
Es más, otra función muy interesante es la de automatizar que se cierren a la mitad cuando llueve. Así evitaremos que los cristales de nuestras ventas se ensucien: ¡más ahorro de tiempo!
¿Has probado alguna vez en despertarte con luz natural? Otra ventaja de domotizar tus persianas es que puedes programar su apertura de forma progresiva en un horario determinado. Por ejemplo, a las 7:00h la persiana de tu dormitorio se abre un 10%, a las 7:10h hasta el 20% y a las 7:20h hasta el 50%. Sustituir la molesta alarma del despertador por la luz natural, además de ser un pequeño placer, te ayudará a detener la producción de melatonina, de forma que podrás activarte de forma más rápida.
Además, reduce el estrés, lo cual en tiempos de pandemia es muy importante.
Encender y apagar las luces
Puedes domotizar tanto tus luces empotradas como cualquier lámpara auxiliar que tengas. Así, podrás programar su encendido y apagado en horas concretas y olvidarte de hacerlo.
Además, puedes cambiar tus bombillas por unas que sean regulables, de forma que podrás crear diferentes ambientes para cada momento. En momentos en los que pasamos mucho tiempo en casa esto es especialmente interesante, porque podemos configurar un tipo de iluminación para cuando teletrabajamos, por ejemplo, y otro para cuando queremos relajarnos.
Calefacción inteligente
Imagina que hay un día solo estás tú en casa teletrabajando en una de las habitaciones, es invierno y hace un frío que pela. Encender la calefacción en todo el piso o casa puede ser un gasto importante.
Una solución a este problema es convertir tu calefacción en inteligente, de forma que puedas controlar cada radiador de forma independiente. Así, podrías asegurar una temperatura agradable en la habitación en la que estás teletrabajando y mantener el resto de los radiadores apagados, lo que se traduce en un ahorro considerable.
Lo más interesante es que puedes domotizar tu calefacción sin sustituir ni la caldera ni los radiadores, lo que supone una gran ventaja.
Mejorar la seguridad en la segunda residencia
Ahora que hemos visto varios ejemplos de cómo la domótica puede ayudarte a aumentar el confort en casa en tiempos de pandemia, veamos otra posible aplicación interesante.
Quizá tengas una segunda residencia a la que no puedes ir tan a menudo como quisieras por las restricciones. A través de la domótica, puedes controlar a distancia en cualquier momento su estado e incluso simular presencia para aumentar la seguridad.
Controlar el estado a distancia
Si domotizas tu segunda vivienda podrás controlar desde tu móvil el estado de las luces, puertas y ventanas (por ejemplo, detectar si alguna está abierta), persianas e incluso electrodomésticos. Así, puedes asegurarte de que todo está en orden, aunque no estés allí.
Si instalas cámaras de videovigilancia podrás incluso ver qué está ocurriendo desde tu propio móvil.
Simular presencia
Si te preocupa pasar largas temporadas sin poder ir a tu segunda residencia, la domótica puede ayudarte a simular que hay gente, aunque en realidad esté vacía.
Tanto de forma programada como directamente a través de tu móvil, puedes encender y apagar luces, subir y bajar persianas e incluso encender la radio o la televisión para disuadir a posibles personas que pudieran fijarse en si hay movimiento en la vivienda.
Conclusión
Como ves, la domótica ofrece muchas posibilidades para aumentar en confort de tu vivienda, ahorrar consumo energético e incluso aumentar la seguridad. Estos beneficios son especialmente interesantes en momentos de pandemia, convirtiendo nuestro hogar en un lugar en el que queramos estar.